#5 Las CAMPEONAS de todo el mundo.
Lo que aprendimos durante este mundial de atletas de un deporte que algunos no querían pasarles el balón.
En primer lugar, que España haya ganado el Mundial de fútbol femenino es maravilloso y nos alegra a los españoles y aunque imagino que para las inglesas no lo será tanto, creo fervientemente que lo que nos demostraron, es que tanto las españolas ganaron para todo el mundo y cada gota de sudor vertido por el resto de competidoras también merece su crédito.
Me gustaría resaltar que en los últimos años estas mujeres que han luchado por un deporte que aman, no se han descorazonado por nada ni por nadie y han creído en ellas hasta el último minuto y no solo las españolas, sino cada una de las mujeres que han salido a correr y competir por un balón que algunos machistas no se lo querían pasar.
Yo he aprendido y sigo aprendiendo de ellas al no rendirme y a mejorar el juego (el negocio, la empresa) ya que ellas no buscan lesionar a otra compañera, no tienen problemas en demostrar orgullosamente su orientación sexual, quien quiera libremente expresarse, no pierden tiempo tirándose al suelo cada vez que les cometen una falta ni pierden tiempo sin razón.
Mejoran el juego, así de sencillo y así de fácil. Tenemos que mejorar el juego. Lo antiguo no vale y gracias a ellas lo he visto más claro.
Eso es lo que me llevo de las centenares de atletas que corrieron por las antípodas: que no se rindieron jamás, que siguieron corriendo hasta el último rincón de campos de barro o de césped artificial, que cobran muy poco inmerecidamente y que aún así: sonríen, se esfuerzan y se han convertido en nuestras Diosas terrenales del planeta entero.
Ahora cualquier niña tiene referentes reales, de personas reales.
Desde ya hace un tiempo me ganaron, pero después del mundial, me tienen como su seguidor fiel número uno. Son las nuevas personas admiradas en base a su esfuerzo, a su dignidad y a su trabajo constante sin necesidad de ostentar coches caros o músculos de plástico.
¿Cuánto tiempo tiene que pasar para que cambiemos de ídolos?
Así que por eso y por mucho más nosotras y nosotros, los que formamos Awards of Happiness queríamos decirles algo: “gracias por hacernos entender que los otros eran los ídolos de papel y que vosotras sois las Diosas terrenales que estábamos esperando, aunque no lo supiéramos”
Y dos últimas cosas: ¿Aitana Bonmatí de qué planeta es?
Y por favor, que echen a desagradables trogloditas que besan sin permiso a una mujer. No hay más discusión sobre el tema.